La mallorquina Maria del Mar Bonet, que en este 2007 celebra su sesenta aniversario, es la voz y la conciencia del Mediterráneo. Sus canciones, que continuan vivas, pues han sabido mantenerse al margen de las tendencias y de las modas, poseen un sabor inconfundible. Un aroma destilado de las tradiciones musicales y del patrimonio cultural de los diferentes pueblos ribereños de ese pequeño pero a la vez inmenso mar que están unidos por una historia común.
La mallorquina Maria del Mar Bonet, que en este 2007 celebra su sesenta aniversario, es la voz y la conciencia del Mediterráneo. Sus canciones, que continuan vivas, pues han sabido mantenerse al margen de las tendencias y de las modas, poseen un sabor inconfundible. Un aroma destilado de las tradiciones musicales y del patrimonio cultural de los diferentes pueblos ribereños de ese pequeño pero a la vez inmenso mar que están unidos por una historia común.